Y volverán tus pasos de las sombras,
y me traerán con ellos tu presencia,
así veré la cara que me ocultas
y esa sonrisa dulce y tan eterna.
Tus pasos, tan cansados, tienen frío,
tras caminar muy duro por la tierra,
atrás quedaron días con sus noches,
de ese cruzar caminos y callejas.
Y atrás quedaron bellos sentimientos,
nacidos al calor de aquella hoguera,
con el rasgueo tierno de guitarras
bajo la luna llena y las estrellas.
Teseo ©
27/10/08