Somos aves de paso en esta noche
contemplando la luna y las estrellas;
es tan dulce el murmullo que se escucha
de ese mar con las olas que ahora llegan.
Somos aves volando a su destino,
descansando en la torre de la iglesia,
esas piedras que guardan mil historias
de marinos guerreros y poetas.
Somos aves con alto en el camino
para ver a la noche que se aleja,
y observar como salen esos rayos
de ese sol, con el alba, que despierta.
Teseo ©
25/08/08