Cuando todo te falte regresará el silencio,
la noche con las sombras aquellas que no han muerto,
fantasmas del pasado vestidos con sus velos,
las negras golondrinas que van tras los vencejos,
la torre de la iglesia dejando sus lamentos,
los sones desgarrados que dejan los recuerdos.
Hay gritos que se escuchan también en los desiertos,
hay rosas y jazmines que esperan otros reinos,
hay lechos perfumados, suspiros en los pechos,
hay manos que se agitan y buscan otros cuerpos,
hay brisas y susurros que van hasta tu pelo,
son notas simplemente que dejan mi lamento.
Atrás quedó la vida los sabios y los necios,
los hombres con su risa los bancos y el dinero,
atrás quedó la aldea, el trigo y el centeno
las manos arrugadas cavando con denuedo,
atrás quedamos todos, paisanos y labriegos
los hijos de la vida vencidos sin desprecio.
Teseo ©
27/01/09